Considero que la labor social no es cuestión de un cargo o puesto laboral. 

Hoy en día es común hacer preguntas ante tantas situaciones adversas; de escasez, de soledad, de miedo, de desprotección... y la respuesta que tenemos es un profundo silencio.

Silencio por parte de la administración, silencio por parte de la sociedad, acostumbrada a no tener que cuestionar, silencio ante una proyección de futuro o promesas vacías, carentes de palabras firmes que generen seguridad, capacidad y empoderamiento. 

Este espacio se crea como una herramienta más, a disposición de aquella persona que necesite un cambio, un resurgir, una visión de solución para su situación.